Seguros de salud, cuídate y cuida a los tuyos
Retrasos, esperas, derivaciones a centros que no están cerca de nuestra casa…en cualquier circunstancia son molestos, pero cuando lo que está en juego es la salud pueden suponer además un riesgo. Por eso, los seguros de salud se han convertido en una alternativa eficaz a la tradicional cobertura médica. ¿Compensa? La respuesta es clara: sí. Compensa por muchos motivos y no resulta tan caro como muchos piensan, en Seguros de salud ofertas hay muchas y realmente interesantes.
Pero lo primero que hay que valorar es, por supuesto, la atención médica. Un buen seguro privado garantiza no solo rapidez, sino también los mejores profesionales, la mejor asistencia, los mejores aparatos y los mejores centros. Debe ofrecer, además, la posibilidad de elegir consulta, hospital y profesional y de contar con una segunda opinión cuando el paciente así lo desea. La salud es un tema con el que conviene no esperar y mucho menos jugar, de ahí la importancia de asegurarnos siempre la mejor cobertura médica.
Planes y ofertas
Pero contar con un buen seguro no tiene por qué resultar privativo. Las compañías, además de ofertas específicas para determinadas coberturas como puede ser la dental, suelen ofrecer diversos planes para ajustarse a las necesidades y los bolsillos de sus pacientes. Por eso se puede contratar un sencillo seguro que cubra únicamente la atención primaria: médico de cabecera, pediatra y enfermera. Pero también es posible elegir un completo seguro que cubra todas las posibles contingencias y que incluya incluso cobertura sanitaria en el extranjero. Entre ambas posibilidades las compañías ofrecen un amplio abanico de planes para poder satisfacer cualquier tipo de demanda.
Sin embargo, a la hora de elegir un seguro de salud conviene analizar varias compañías y comparar las prestaciones. Es importante valorar las ofertas que puedan dar, pero sobre todo hay que analizar muy detenidamente algunos aspectos que a veces no se conocen o no se les da el valor adecuado:
- Carencia: es un periodo de tiempo que algunas compañías incluyen y que supone que no se pueden recibir determinadas asistencias hasta un tiempo después de haber contratado el seguro. El caso más habitual y conocido es el de seguimiento de embarazo.
- Preexistencia: supone la imposibilidad de contratar el seguro si se tiene una patología previa, en ocasiones se acepta, pero la cuota será más alta.
- Copago
En cualquier caso, valorando las circunstancias particulares, el presupuesto del que se dispone y los distintos planes y ofertas, siempre es posible encontrar un buen seguro de salud para cada persona.